ESTO NO ES UNA TELENOVELA DE VERDAD... LOS ACTORES MENCIONADAS NO TIENEN NADA QUE VER CON ESTE PROYECTO, SOLO INSPIRAN LA WEBNOVELA. HOMENAJE A PABLO MARTINEZ QUE ME TIENE ENAMORADO CON SU TALENTO Y SU CUERPAZO. SE ECHA DE MENOS A SIMON Y LE DEDICO LA HISTORIA A LA ESPERA DE FELIX, SU NUEVO PERSONAJE.
lunes, 12 de marzo de 2012
Capitulo 91
Iker se ha sentado al lado de Simón. Sabe perfectamente quien es, sabe que está triste porque su hermano lo ha dejado, además siente una fuerte atracción hacia Simón. No soporta verlo mal. Para Simón, Iker es un desconocido. No le hace caso. Sentado en la orilla, mira frente al mar.
--¿vos quien sos? Quiero estar solo. No sé qué querés pero no me interesa.
Iker mira a Simón dulcemente. Se saca un pañuelo, tiernamente seca las lágrimas de Simón mientras le dice:
--Un chico tan guapo como tú no debe llorar nunca.
Simón mira a Iker algo fríamente.
--¿de dónde saliste tú? No sabes nada de mi.
Iker se muestra sonriente.
--Si alguien te hizo daño es un tonto que no merece ninguna de tus lágrimas.
Iker va hablando y Simón lo mira con desconfianza.
--¿de dónde saliste tú? ¿qué sabés de mi?
Iker extiende su mano.
--Yo soy Iker. Te vi acá solo y bueno, yo no estaba haciendo nada y vos tampoco pues podemos no hacer nada los dos juntos ¿no?
Simón medio sonríe con melancolía.
--tenés una sonrisa muy linda, no debes estar triste –le dice Iker.
--Las cosas no son tan fáciles.
--Sé que te han roto el corazón, a mi también me lo han roto muchas veces. Las cosas pasan porque sí.
Iker es simpático, dulce. Es muy guapo. Simón lo escucha en silencio. La voz de Iker resulta muy relajante, Simón se siente muy a gusto con él. De repente, Iker se levanta.
--seguime –dice mientras se acerca al agua.
Simón sigue sentado. Iker se muestra sonriente.
--seguime.
Simón se levanta pero no se mueve.
--No hay nada mejor que un buen baño para esquivar las penas.
Sin sacarse la ropa, Iker se mete en el agua de pies a cabeza. Simón se queda de pie en la arena mirándolo incrédula.
--Ven, tío. El agua está muy buena –le dice haciéndole gestos para que se meta con él.
Simón no se mueve.
--sos, un loco. Yo no me voy a meter en el agua vestido y menos con un desconocido.
Iker se muestra simpático. Va saltando, salpicando agua.
--ya te dije que me llamo Iker.
Iker salpica de agua a Simón que se aparca un poco. Iker ha logrado borrar la tristeza del rostro de Simón.
--Ven, no seas amargo. El agua es muy relajante y purificante. Es lo que necesitas para sacudir la tristeza.
Simón sonríe.
--Te ves muy lindo mientras sonreís –le dice Iker a Simón—no deberías dejarlo nunca y sí no me conoces pero si no vienes no me vas a conocer nunca.
Iker, a parte de guapo, es muy simpático y deja cautivado a Simón. Simón se siente embrujado por el guapo Iker. Es como si la mirada del joven lo hubiera hipnotizado. Simón va hacia el mar y se tira ante la mirada satisfecha de Iker. Se sonríen, se agarran de las manos y bucean. Nadan hacia la superficie y se miran intensamente. Simón se encuentra bajo un hechizo, el hechizo de la mirada, la sonrisa y la belleza de Iker. Y allá, en medio del mar, bajo la influencia de la luna y las estrellas se besan. Es un beso explosivo. Ambos sienten escalofríos. Simón está hechizado. Iker siente una profunda atracción hacia Simón. Está muy bueno pero su ternura lo ha enamorado. El deseo estalla, está borrachos de placer. Salen del agua totalmente mojados. Los dos ríen.
--sos un loco, ¿de donde saliste tú?
Iker está muy feliz. Simón le ha gustado desde el primer día que lo vio y no sabía como acercarse a él. No le podía gustar el chico por el que sufría su hermano pero Ángel ha borrado a Simón de su vida y a Iker le gusta demasiado Simón.
--digamos que estaba en el lugar indicado.
Simón tiene una sonrisa que enamorada a Iker.
--yo me llamo Simón.
Iker lo sabe pero no dice nada. Le devuelve la sonrisa. Le hubiera gustado que le dijera otro nombre, que no fuera el ex de su hermano pero eso es algo de lo que no se quiere ocupar. El uno en frente del otro. Se observan con una sonrisa. La pasión se ha encendido en sus ojos y ambos sólo tienen un mismo deseo que no necesitan expresar con la mirada: hacer el amor. Se quedan unos segundos en silencio ya que no se atreven a tomar la iniciativa pero Simón está demasiado caliente, Iker está mojado. Simón desea descargar, además para él esa noche está resultando mágica y no desea que acabe, desea compartir todo con Iker. Para Iker es también un momento especial pero no quiere olvidar que es el ex de su hermano. No sabe si se acostaron o no, le gustaría que fuera Simón quien tomara la iniciativa. Simón no lo hace esperar. Le palpa los bolsillos para ver si lleva lo que desea. Encuentra tres condones. Simón los saca. Se lo muestra mientras se miran pícaros. No hace falta las palabras, sus miradas, sus pieles lo están diciendo todo. Se empiezan a desnudar mientras se excitan ante la oscura desnudez del otro. Simón se sienta en la arena e Iker con él. Se besan. Iker se va cayendo sobre Simón. No se ven mucho pero sienten sus cuerpos, el calor de uno calienta al otro. La boca de Iker y la de Simón so una durante buen rato mientras las manos de uno recorren el cuerpo del otro con intensidad. Simón siente como, lentamente, la lengua del guapo Iker y sus manos van recorriendo su cuerpo. Se entretiene en las partes que hasta ahora le eran secretas y prohibidas. Simón se mueve para poder chuparse la verga el uno al otro un buen rato. La noche es su mejor cómplice. Saben que nadie podría verlos a no ser que estuviera ya encima de ellos y no hay gente cerca así que se olvidan de todo y se centran en el placer que les da sus cuerpos. Iker se desprende un poco de Simón.
--No te vayas –jadea Simón.
Simón está recaliente y, por un momento, teme que Iker se haya desencantado y desaparezca. Iker le sonríe. No le dice nada. Simón ve la figura de Iker abriendo un preservativo y abrigando con él su gigantesca verga. Los dos están muy contentos juntos. Iker lo besa mientras lo va acariciando.
--tumbate…
Simón se queda con la cara en la arena mientras Iker, después de mojarle el trasero con su propia saliva y meterle un poco los dedos para abrir camino, se clava en Simón que se retuerce de placer. El gusto es indescriptible. Simón suda y gime de gusto mientras Iker se mueve suavemente en su interior. Sus gemidos se confunden con los de Simón. Su placer es acompañado con el sonido de las olas de fondo. Simón e Iker son un solo cuerpo extasiado de placer. Los dos son muy atractivos y los dos tienen mucha experiencia. Disfrutan como nunca. Simón se siente explotar por dentro. Nunca en su vida había sentido tanto placer. De los muchos que ha vivido este es sin dudarlo el polvo de su vida. Incluso teme romperse de tanto placer. Simón está gozando tanto que teme lastimarse de placer. Se viene como si fuera la primera vez. Sus gritos inundan la playa. Iker y Simón son dos profesionales, tienen su buena experiencia y se lo hacen pasar muy bien al otro. Iker explota. Cae al lado de Simón retorciéndose de placer mientras se saca el condón.