Simón y Thiago en la misma habitación en la que hace dos años ambos perdieron su virginidad juntos. De nuevo reviven esa pasión que los debora, que los consume. A Thiago de Simón sólo le atrae que está muy bueno, Simón siente cosas por su primo, sus sentimientos son muy parecidos al amor. Ha pensando tanto en su primo y ahora está ahí con él. Quisiera que el tiempo se detuviera en ese momento, quisiera ser siempre tan feliz como lo está siendo en ese momento, Para Thiago es un polvo más con un guapo muy guapo, con el añadido que es su primo. Thiago se ha encontrado con un Simón más maduro, con un Simón mucho más guapo, más musculoso y lo que le gusta más: un Simón experto en el terreno sexual. Thiago goza de la mamada que le está haciendo su primo. Se excita al pensar que ha comido muchas vergas para aprender a hacerlo tan bien y eso es algo que le pone más cachondo aún. Le interesa que Simón haya estado con otros hombres porque espera que así no le reclame nada, que comprenda que de la misma manera que los otros lo han hecho gozar sin ningún tipo de compromiso pues él espera lo mismo. No le importan los sentimientos de Simón que está buscando sino un amor almenos un amigo. A Thiago sólo le importa chingárselo. Simón no quiere pensar en nada, sólo disfruta y vaya sí lo hace. Nunca ha sido tan feliz con alguien como lo está siendo con Thiago. Simón se la está chupando a Thiago bien a gusto. Thiago saca de la boca de Simón su verga. Lo mira con cara de sátiro.
--Ahora me toca a mí.
Los dos guapos primos se miran con complicidad mientras que Thiago le hace gestos a Simón para que se tumbe en la cama. Simón lo hace, con las piernas en el piso. Thiago se mete en medio. Thiago está encantado con la verga de Simón, no la recordaba tan grande. Simón está muy excitado. Thiago es el que lo acaba de desnudar apareciendo ante sus ojos una enorme verga casi el doble de la de Thiago. Thiago se acuerda que a Simón le daba vergüenza mostrarse desnudo ante él y no lo entiende si es muy guapo, si tiene un cuerpo hermoso y además está muy bien dotado. Se traga sólo la punta pero muy rápido, el capullo de Simón queda todo rojo. Simón tiene medio cuerpo tumbado en la cama y se retuerce de placer. Thiago le levanta las piernas, le va lamiendo los huevos y también todo el culo. Simón se muerde la mano. Siente tanto placer que teme que se vaya a venir, no cree poder aguantar mucho y no quiere quedar en ridíclo. Además le apetece ser activo y Thiago es de los pocos que se lo han permitido. Tiene la suficiente confianza con él como para pedírselo aunque Thiago no le diga nada. No puede gritar porque aunque no está en un lavabo público su abuela está en el piso de abajo y no es cuestión que los escuche. Los dos se levantan a la vez, están muy calientes y tienen mucha complicidad y confianza, eso hace que disfruten mucho más. Nada más mirarse ya saben lo que el uno quiere del otro.
--vamos –dice Thiago con una cara de pervertido que no puede ocultar.
Simón se sube en su cama, se arrodilla. Se pone a cuatro patas. A Thiago le enciende muchísimo verlo así, tan dispuesto, tan excitado, esperando que Thiago lo llene con su verga. Thiago, con una mano, le va dando azotes mientras le va abriendo el culo. Le va introduciendo el dedo, luego dos. Simón apoya su cabeza en el colchón retorciéndose de placer. Thiago es con quien más disfruta, no porque sea el mejor, el más experto sino porque es con el que ha tenido una relación más especial. Siempre recordará aquellos días de verano donde descubrió el sexo por primera vez. Nunca ha sido tan feliz y aunque ahora ya no es lo mismo es feliz en sus brazos. A Thiago le pone cachondo dar azotes a Simón, meterle los dedos y ver lo mucho que su primo goza con eso. Pone una cara de salvaje muy seductora. Thiago lo va rozando ya con su trompa preparado para penetrarlo.
--supongo que has cumplido con el pacto de sólo hacerlo sin condón conmigo.
A Thiago le gusta hacerlo sin condón pero sólo confía en Simón, sólo con él se atreve y eso es un placer añadido. A Simón no le gusta mentirle. Le da rabia haber fallado y por un chico que ni era guapo pero confía en el feo con el que estuvo.
--claro ¿y tú?
--claro.
Los dos sonríen satisfechos. Es un acuerdo que tenían porque a los dos les gusta hacerlo sin preservativo, les gusta que el otro haya respectado ese pacto. Simón muerde la cama, disfruta mucho teniendo la verga de Thiago dentro de él.
--Que bien ha entrado mi verga en tu culo, que gusto¡
Thiago le habla lascivamente.
--te gusta eh, cabrón ¡cómo disfrutas con mi verga¡
A Simón le duele de tanto que le gusta. No es capaz de decir nada pero Thiago le ve la cara., sabe que está sufriendo teniendo que frustrar sus jadeos. Thiago sonríe con orgullo por el placer que le está proporcionando a Simón y por el que a la vez está obteniendo.
-claro que te gusta cabrón, a tu culo le encanta mi verga –se contesta el propio Thiago sonriendo con cara de degenerado porque tiene a su guapísimo primo bajo su dominio y totalmente roto de placer.
Thiago le azota de nuevo.
--Me encantan tu culo, es tan peludo. Nunca he visto uno igual. Es el mejor culo que he visto en mi vida –va jadeando.
Simón no dice nada porque teme que si contesta sus gritos se placer se oigan en toda la casa para no decir en todo el pueblo.
--me vuelves loco –jadea Thiago mientras se viene.
Simón se levanta. Ambos están agotados y satisfechos de tanto gozar pero aún tiene ganas de más. No se cansan nunca el uno del otro. Simón tiene muchas ganas de ser activo y Thiago de tener dentro de su cuerpo esa verga. Se deja dominar. Se queda tumbado en la cama pero con el culo en pompa. Simón se lo va chupando y luego lo penetra. Thiago lo ve algo torpe y al principio le duele.
--despacio, con cuidado… así – va jadeando entre el dolor y le gusto.
Una vez ya está dentro, Simón se clava con rabia, con fuerza, se la mete toda. Simón nunca había sido tan salvaje y a Thiago le gusta. Se rompe de placer aunque también de dolor.
--Me gusta, me gusta que me chingues pero ves con cuidado.
Ambos son un solo cuerpo que no deja de disfrutar. Caen el uno al lado del otro. Sudados, cansados. Se miran, casi no tienen fuerzas para hablar. Se sonríen.
--¿te han chingado mucho? La has mamado muy bien y tienes el agujero muy grande.
Thiago habla de una manera muy frívola y a Simón le duele.
--¿es que no te importa? –dice Simón que le gustaría verlo celoso.
--¿porqué me iba a importar? Yo también he chingado mucho. Si tú has estado con muchos pues me daría envidia, ¿con cuantos has estado? –dice Thiago con mirada lividinosa.
Thiago habla así porque tiene mucha confianza con su primo y porque piensa que este ha entendido que sólo son dos primos que se divierten chingando. Simón se enoja. Se incorpora, pone los pies en el piso para levantaese. Thiago le acaricia la espalda y Simon se muere del gusto. Lo mira y la sonrisa de Thiago lo derrite.. A Simón le gusta estar con su primo.
--¿y mañana?
Thiago es muy amistoso con él:
--ya te lo he dicho, ¿qué importa el mañana si te gusta estar conmigo?
Simón se tumba al lado de su primo. Lo mira a los ojos.
--pero júrame que no te vas a ir sin decirme nada. No lo soportaría.
Thiago lo mira con su rostro angelical y le dice:
--te lo juro.
Simón se queda dormido confiada.
Thiago se levanta al amanecer, con cuidado de no despertar a Simón. Se va vistiendo procurando no hacer ningún ruido. Sólo ha traído un pequeño bolso, está por salir cuando Simón despierta.
--¡me ibas a volver a hacer lo mismo¡ --le reclama molesto.
Thiago pone cara de “¡mierda¡” y se gira. Simón se levanta totalmente desnudo. Es muy atractivo. Thiago lamenta que no haya mucha luz para no poder disfrutar del maravilloso espectáculo.
--no pasa nada –dice con una sonrisa.
--¡Me lo juraste¡ --muy dolido.
Thiago teme que Simón le haga un escándalo y se entere la abuela.
--A mi no me vengas con sus bobadas, no soy tu novio –le reprocha.
Simón está muy decepcionado de su guapo primo.
--¡si te vas no vuelvas¡ --le dice amenazante.
Thiago le sonríe abiertamente:
--No es tu casa.
Y se va sin más. Simón se pelea con la almohada, la golpea, la tira por los aires y llora con rabia.
