miércoles, 18 de enero de 2012

Capitulo 61



Simón sale de su cuarto desnudo. Sólo envuelto con la sábana.
--¿¡Thiago?¡
Aún no ha amanecido. No puede creer que Thiago lo haya vuelto hacer lo mismo de nuevo. Siente mucha rabia. Mucha bronca. Se lo reclama así mismo.
--¡¡Es que sos un boludo?¡ ¿¡porqué creíste en él otra vez más?¡ Es una basura.
Simón se siente muy herido. Ya ha olvidado a Lucas, los golpes de su padre que aún se lo notan. Su alma sangra de dolor y es por Thiago. Da patadas a las sillas. Doña Esperanza se despierta. Se levanta en ropa de cama. Se asusta mucho al ver a su nieto tan mal. Lo echa en sus brazos.
--Simoncito, ¿¡qué te ocurre?¡
Simón balbucea. Habla llorando. No tiene ganas de hablar de sus sentimientos, de descubrirse pero es mucho el dolor y la rabia que siente.
--¡Thiago se fue en la madrugada como un ladrón¡
Esperanza no quiera darse cuenta de lo que está pasando entre los primos porque si Jay se enterara podría ser una tragedia y Esperanza no es una excepción. Todos temen a Jay. La anciana mira a su nieto como si estuviera diciendo tonterías.
--niño, me asustaste, creí que había pasado algo grave.
--¡Thiago me engañó, me dijo que no se iba¡
El chico habla entre llanto y su abuela tampoco lo entiende mucho.
--Thiago estaba de paso, llegó ayer. Se tenía que ir en la noche. No era muy tarde. ¿No se despidió de ti?
Simón se siente un tarado. Eso le duele más. Se golpea los puños.
--¡Se burló de mi¡ ¡no me dijo nada¡
--¡no te pongas así¡ ¡¡ha dicho que volverá¡ --abuela.
Simón está furioso. Lleno de rabia. De rencor.
--¡pues no quiero que vuelva¡ ¡¡no lo quiero volver a ver más¡
Muy enojado. Sube las escaleras y se encierra en su cuarto. Llora de dolor y rabia y maldice a Thiago. Lo que más le duele es que juegue con sus sentimientos, que lo haga sentir el más feliz de los hombres sabiendo que después le va a pegar una buena puñalada. Esperanza vuelve a su dormitorio. No quiere pensar pero siente que vive en una amenaza constante y que en cualquier momento todo se va a descubrir y ocurrirá una tragedia. Reza para que eso no ocurra nunca o que almenos ella ya no esté viva para verlo. A solas en su cuarto ya no es la mujer dulce que se presenta ante Simón si no una mujer amargada y con mucho dolor en su interior. Muchos secretos que no deben ver a la luz.

Simón no puede volver en toda la noche. Se da una buena ducha y llora. Está un buen rato descargando todo su dolor hacia Thiago. En la mañana siguiente, Simón se muestra como si nada. Es pura pantalla, como la de su abuela. El dolor y la rabia va por dentro y a ambos eso los consume poco a poco. Esperanza es muy cariñosa con su nieto.
--¿te encuentras mejor, Simoncito?
Simón da un cariñoso beso a su abuela.
--sí, no te preocupes. No sé qué me pasó. Lo que pasa es que odio que me mientan. Eso no lo hacen los amigos.
--No te preocupes. En unos días volverá.
Simón fuerza una sonrisa y Esperanza se convence así misma que no pasa nada. Simón no tarda en salir de la casa. Ese pueblo le trae muy buenos recuerdos. Ha vivido momentos muy buenos pero también malos. En un rato que no hay clientes, se mete en la carnicería de Aguirre. El carnicero, todo ensangrentado, se sorprende al ver a Simón pero le gusta.
--No te esperaba tan pronto. No sabía que estabas en el pueblo.
Simón es un animal herido y despechado.
--¿tienes un momento para mi? Te necesito.
Aguirre asegura que no haya nadie en la calle. Cierra la tienda y pone un cartel que dice: regreso en unos minutos. Mira a Simón con mirada libidinosa. No se preocupa de sus golpes. A Simón le duele que el hombre sea así pero se pone en sus manos. Deja que se desahogue con él. Es precisamente lo que no le gusta de los hombres, que lo usen como juguete sexual pero es la mejor manera de descargar su rabia.



Días después.. Simón es un chico triste. Va a su encuentro con Aguirre pero Thiago le da alcance. Lleva una bolsa en los hombros. Recién llegaba al pueblo.
--¡chico, qué rápido vas¡ ¡llevo un buen rato detrás de ti¡
Thiago se muestra como si nunca hubiera roto un plato. Simón siente que tiene un volcán en erupción dentro de él. Desea besar a Thiago y a la vez golpearlo. Opta por no hacerle caso. Lo mira con indiferencia y sigue caminando. Thiago se hace el ofendido.
--¡oye, no me trates como si no me conoces¡ ¿¡qué te has creído?¡
Simón entonces ya no puede más. Se da la vuelta y escupe a su primo con rabia:
--¡¿Crees que soy tu juguete?¡ ¡¡me dejas y me tomas¡ ¡¡pues ya me cansé¡ ¡¡ahora no quiero saber de ti¡ ¡después de lo que me hiciste no sé como te da la cara de venir como si nada¡
Thiago agarra a Simón del brazo.
--vamos a la casa, veo que hoy tenés un mal día.
A Simón le da rabia que Thiago lo trate como si nada.
--¡Es que eres increíble¡ ¡me traicionas y ahora vienes aquí como si no pasa nada¡
Thiago se lleva las manos a la cabeza.
--No me hagas una escena de celos. Vamos a la casa y hablamos.
--¡yo no quiero ir contigo, yo quiero que te vayas del pueblo¡ ¡¡no quiero verte más¡
Thiago va mirando a la gente. Habla en voz baja.
--No te comportes como un boludo, que la gente nos va mirando.
Thiago fuerza una sonrisa y dice a la gente:
--No pienses mal, somos hermanos. Está enojado porque le saqué una novia.
Simón mira a Thiago dolido y dice:
--¡largo del pueblo y no vuelvas, yo ahora tengo a otro¡
Simón ha sido su mejor amante y siente algo parecido a los celos.
--¡no es verdad, no puedes estar con otro¡
Simón sonríe a Thiago con rabia. Sigue su camino y Thiago lo sigue. Aguirre está ya en la puerta esperando a Simón. Disfruta mucho con él. Simón se le echa en sus brazos y lo besa para que, un horrorizado Thiago, los vea. Aguirre se asusta. Se enoja.
--Pibe, ¿qué hacés¡¡
Se da cuenta que sólo un chico que no conoce los ve. Mete a Simón en la tienda.
--¡no vuelvas a hacer eso¡
No puede cerrar porque Thiago se mete de un empujón en la tienda y se enfrenta a su primo.
--¡no puedo creer que después de estar conmigo estés con eso¡
Aguirre cierra la puerta. Lo que más miedo le da que alguien los vea.
--No me vayan a hacer un escandalo. Vayan fuera a resolver sus problemas.
Simón no quiere ir con Thiago.
--¡no quiero estar contigo¡ ¡
--no te comportes como un crío, te encanta coger conmigo.
--Estoy enamorado de Aguirre.
Eso es algo que sorprende tanto a Thiago como a Aguirre. Muerte de la rabia, Thiago dice:
--¡elegí¡
Simón ha puesto un bozal a su corazón. Siente amor por su primo pero no quiere volver a sufrir por él. Abraza a Aguirre:
--Me quedo con él.
Thiago se va furioso. No le piensa rogar a Simón y se va dejando a Simón muy triste.