A Simón le molesta el tono en el que Thiago le pregunta si lo ama. La respuesta sería que sí pero no se atreve a decirlo. No quiere que se burle de él. Le responde con otra pregunta.
--¿en serio has estado con otro?
Simón se está muriendo de los celos. Quisiera que Thiago le dijera que no, que sólo ha estado con él, que es especial lo que tuvieron. Thiago se lo toma todo con burla.
--¿no me digas que tú no?
A Simón le da mucha rabia que Thiago se ría de él.
--Pues no, para mi el sexo es algo especial.
Simón ríe divertido.
--es que eres un bicho raro… No tiene de malo coger. Yo hasta lo hice con un profesor, era feo y gordo pero me sirvió para aprobar.
Simón lo mira sorprendido.
--¿en serio hiciste esto? ¿¡pero qué bestia eres tú?¡
Simón está muy dolido, se arrepiente de haber ido a verlo.
--¡No sé para que vine¡
Simón va hacia la puerta. Thiago le agarra del brazo:
--porque te morías por verme ¿no?
Thiago se muestra seductor. Lo abraza por la espalda.
--ya estamos acá, no peleemos.
Simón se gira. Lo mira triste.
--Hice un viaje largo para verte y ahora resulta que a ti te da igual uno que otro. Yo…
Thiago no le deja seguir y lo besa. Simón se derrite, responde a la pasión de Thiago. Se deja llevar a la cama. Thiago tira a Simón a la cama y lo empieza a desnudar. Simón jadea por las caricias de Thiago pero no cede del todo.
--espera, no vine a por eso.
Thiago no le hace caso, lo va desnudando.
--vamos a disfrutar que estamos los dos juntos…
Thiago desnudo a Simón de cintura para abajo, le va tocando en sus partes sensibles. Simón tiembla, jadea pero no quiere que Thiago lo use como una simple diversión.
--¿nos veremos el año que viene?
Thiago tiene la verga de Simón entre sus manos. Va a metérsela en la boca, mira a Simón sorprendido.
--¿a qué viene eso?
--Contesta, es importante.
Thiago sonríe, está entre las piernas de Simón.
--No sé, eres demasiado aburrido.
Ese comentario le molesta mucho a Simón:
--¿qué cosa esperas de mí?
--¿porqué piensas tanto? Yo aún no hago los 18, tenemos que divertirnos.
--Eso sí para ti? ¿una simple diversión?
--¡claro, y de la mejor¡
Thiago mira a Simón con cara de depravado. A Simón no le gusta nada que Thiago lo trate como un simple trozo de carne.
--¿te daba igual uno que otro?
Thiago le guiña el ojo:
--No, desde que te vi supe que serías el primero pero no el único ¡¡claro que no¡ El sexo es demasiado bueno como para reprimirse.
Thiago traga la gorda verga de Simón y entonces a Simón ya se le quitan las ganas de seguir hablando. Thiago se tira sobre Simón, se besan ardientemente. Thiago se clava en el miembro de Simón, cabalga sobre él. Simón no tarda en venirse.
--si, vaya que se nota que no has practicado –dice Thiago divertido.
Simón se retuerce de placer, Thiago cae a su lado resoplando. Simón está triste. Thiago le acaricia, le guiña el ojo:
--No lo he dicho para que te sientas más.
Simón no se mueve. Está cansado por la explosión. Thiago le va lamiendo el trasero y se clava en él. Simón gime, se rompe por dentro. Thiago ha aprendido a dominarse, tarda en venirse. Ambos sudan, gritan. Gozan como nunca. Los dos explotan de placer, quedan el uno al lado del otro agotados de tanto placer. Se quedan dormidos el uno al lado del otro con una sonrisa.
Simón despierta con una sonrisa. Está desnudo en la cama. Ama a Thiago, ha sido feliz en sus brazos. Tienen pocos días para estar juntos pero está contento porque están de nuevo juntos, quiere revivir la magia de las vacaciones que los unió. Toca la cama, esperaba encontrar a su primo a su lado.
--¿Thiago?
Thiago no está. Se levanta desnudo de la cama.
--¿Thiago?¿estás en el baño?
Entra en el baño pero Thiago no está. Se pone el bóxers. Se asoma por el pasillo.
--¿Thiago?
Se acerca por las escaleras buscando a su primo. La abuela está a los pies de la escalera. Le sorprende ver a su nieto en calzoncillos llamando a Thiago.
--¿Simoncito qué pasa?
--¿Vistes a Thiago?
--ya se fue.
Eso es algo que le sorprende mucho.
--¿cómo que se fue?¿va a tardar?
--Pues no sé si vuelva, se fue a su casa.
Simón sufre una fuerte impresión:
--¿¡cómo que se fue a su casa? ¡no puede ser¡
Simón no puede creer que Thiago le haya hecho eso, que se haya acostado con él y haya desaparecido.
--¿pasó algo entre ustedes?
Simón tiene que hacer un esfuerzo para que no se le salgan las lágrimas.
--¿¡cómo pudo irse sin despedirse de mi?
Esperanza no sabe qué decirle. Simón no dice nada. Corre a su dormitorio. Se encierra en el baño. Está muy dolido.
--¡No voy a llorar¡ ¡¡no voy a llorar por él¡
Simón se mira al espejo. Se limpia la cara para secar sus lágrimas.
--¡si él quiere que me acueste con otros pues eso haré¡
Simón está muy dolido. En esos momentos no piensa en amar sino en borrar a Thiago de su piel, desterrarlo de su corazón.
Días después… Simón ha vuelto a su casa, a su rutina habitual. Está en la biblioteca. Se encuentra a un chico muy guapo. Es mayor que él. Es un rubio muy guapo. Simón lo recuerda de la primaria, es el primer chico que le gustó. Por él descubrió que era gay. Luego le perdió la pista. Ahora lo tiene delante de él. Simón suspira enamorado.
--¡que guapo es¡ --dice para sí—es el chico más guapo que conozco¡
Simón no puede dejar de mirarlo.
--En la escuela estaba bueno pero ahora… Los años han hecho maravillas en su escultural cuerpo.
Si antes le parecía guapo ahora le gusta mucho más.
--Es impresionante, un sueño de hombre.
Es muy guapo, es un chico que quita el hipo. Se ve muy hombre. Tiene el cabello un poco largo y a Simón le encanta. Es el chico ideal para curar su atormentado corazón.
